Chile y un ejemplo para muchos

 

“Una constitución feminista y plurinacional” fue a propuesta progresista en Chile; la izquierda dijo que su proyecto constitucional sería “revolucionario en múltiples sentidos y sienta precedentes a nivel mundial en materia de género y medio ambiente”. Asimismo, la izquierda dijo que “romperá con el tradicional modelo de sociedad chileno basado en la constitución impuesta por el exdictador Augusto Pinochet (1973-1990), de tinte neoliberal. El llamado plebiscito de «salida» del próximo domingo es el resultado de un largo proceso de exigencias de mayor igualdad social, siendo su máximo pico el estallido social de 2019, un fantasma que acompañará a los chilenos el próximo domingo”.

Sostuvo la izquierda que, si en Chile se aprobaba su nuevo orden constitucional, se modificaría el sistema social ya que se erradicaría el “orden neoliberal de Pinochet”, se pasaría del estallido social al “estado social de derechos”, habría una “constitución «feminista y plurinacional»”, se pondría fin la “campaña de desinformación y el poder hegemónico de los medios”, se haría valer la “voluntad popular del pueblo” y se establecería un modelo para el mundo respecto al verdadero “poder constituyente”.

Sin embargo, quizás porque muchos chilenos vieron lo sucedido con Boric cuando fueron apáticos a la política, decidieron decirle “NO” a la barbarie de la izquierda. Posiblemente luego de ver lo fácil que una izquierda en el poder destruye una nación y ante el anuncio de propuestas radicales para ordenar un país entero, es que Chile rechazó la payasada insólita que presentó la izquierda en un país que supo ser potencia y modelo en la región.

Este rechazo pone en evidencia que la izquierda que hoy es hegemonía en Latinoamérica ya no tendrá el poder profundo que supo tener en la famosa década populista. Ha de entenderse que sólo el pueblo es capaz de enfrentarse al poder entreguista y sádico que ha llevado a progresistas, socialistas y socialdemócratas a aniquilar el derecho natural de cada ciudadano; de cada ciudadano depende recomponer el orden alterado y Chile hoy sentó un antecedente.