Según el informe del Wall Street Journal:
Los hutíes, que comenzaron sus ataques a fines del año pasado durante la guerra de Gaza, finalmente comenzaron a utilizar datos satelitales rusos a medida que expandían sus ataques, dijo una persona familiarizada con el asunto y dos funcionarios de defensa europeos. Los datos fueron transmitidos a través de miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, que estaban integrados con los hutíes en Yemen , dijo una de las personas.
No se mencionaron detalles sobre los datos GEOINT que Rusia proporcionó al CGRI (Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán) y que fue transferida por ellos a los hutíes para misiones de ataque y reconocimiento en el sur del Mar Rojo y el golfo de Adén. Además de las imágenes satelitales, no se dijo si los rusos o el CGRI utilizaron vehículos aéreos no tripulados para proporcionar a los hutíes imágenes de alta resolución o flujos de datos en tiempo real para rastrear buques comerciales o buques de guerra occidentales, o si utilizaron los flujos para guiar las armas.
La supuesta ayuda rusa puede explicar cómo los hutíes han ampliado su cobertura de amenazas con misiles y ataques con drones en el sur del Mar Rojo y el golfo de Adén. Desde noviembre de 2023, los hutíes han atacado más de 100 barcos en la región, hundiendo dos y secuestrando otro.
«En Oriente Medio, la ayuda rusa pone de relieve un cambio radical en su estrategia. Putin ha fortalecido sus vínculos con Irán, al tiempo que ha dado la espalda a su relación de larga data con Israel y Benjamin Netanyahu», señaló el WSJ.
La débil política exterior de la administración Biden-Harris ha dejado a Oriente Medio en llamas. Existen ahora importantes problemas en la cadena de suministro del transporte marítimo mundial, ya que cientos de buques portacontenedores se desviaron en torno al Cabo de Buena Esperanza, lo que ha puesto a prueba el suministro de contenedores y han aumentado los costes del transporte marítimo.
Es interesante ver a los demócratas que una vez advirtieron que Trump llevaría al mundo al borde de un desastre nuclear, pero bajo el gobierno de Biden y Harris, el mundo está más cerca que nunca de la Tercera Guerra Mundial: las guerras se están descontrolando en Europa del Este y Oriente Medio, mientras que China podría tomar Taiwán en cualquier momento. EEUU necesita un líder fuerte, no débil.