La élite, los ricos, y los famosos disfrutan de otro nivel de justicia

El WSJ supo publicar lo siguiente en septiembre del 2021: Facebook dice que sus reglas son para todos, pero documentos internos revelan que hay una élite secreta a la que no se les aplican.

En primer lugar vale recordar las palabras de Mark Zuckerberg, quien dijo públicamente que Facebook permite que sus más de 300 millones de usuarios hablen de igual a igual con las élites acerca de política, cultura, periodismo, y que sus reglas de comportamiento son iguales para todos, sin importar la posición o fama.

De acuerdo con documentos internos revisados por Wall Street Journal, en privado la empresa ha construido un sistema que libra a ciertos usuarios, con un perfil alto, de cumplir ciertas normas.

Eso significa que, para unos pocos miembros selectos de nuestra comunidad, no estamos aplicando nuestras políticas y estándares. A diferencia del resto de nuestra comunidad, estas personas pueden violar nuestros estándares sin ninguna consecuencia.

Ya hemos visto a Ocasio Cortez en la ‘Met Gala’ aquella vez, con su carísimo vestido «Tax The Rich», formando parte de esa élite, riéndose de los campesinos a los que dirige junto a esa clase regente.

Sus normativas, sus códigos de conducta, nos dicen que, si seguimos todo ellos, todo estará bien y no nos excluirán de sus plataformas.

El programa, conocido como «Cross check», o «Xcheck», estaba pensado como herramienta de control de calidad para acciones contra cuentas de alto perfil, entre las que se incluyen famosos, políticos, periodistas. En la actualidad protege a millones de usuarios VIP frente al proceso habitual de cumplimiento de la empresa, como muestran los documentos. Algunos usuarios entran en una lista blanca que los hace inmunes a esta obligación de cumplimiento, mientras que otros pueden publicar material en contra de las normas de Facebook a expensas de que las revise un empleado.

Históricamente, Facebook contactó a algunos usuarios VIP que violaron las políticas de la plataforma y proporcionó una «ventana de autocorrección» de 24 horas para eliminar el contenido infractor por su cuenta antes de que Facebook lo eliminara y aplicara sanciones.

El Sr. Stone, el portavoz de la compañía, dijo que Facebook eliminó gradualmente ese beneficio, que aún estaba vigente durante las elecciones de 2020. Se negó a decir cuándo terminó.

A veces, extraer contenido de la cuenta de un VIP requiere la aprobación de los altos ejecutivos de los equipos de comunicaciones y políticas públicas, o incluso de Zuckerberg o de la directora de operaciones Sheryl Sandberg, según personas familiarizadas con el asunto.

Aquí hay una clara guerra de clases, la justicia no es igual para todos. Todo esto es también una señal al resto de empresas para que hagan lo mismo que hacen los bancos de Wall Street y que sobrepasan la Constitución.

Para los usuarios comunes, Facebook administra una especie de justicia aproximada al evaluar si las publicaciones cumplen con las reglas de la compañía contra el acoso, el contenido sexual, el discurso de odio y la incitación a la violencia. A veces, los sistemas automatizados de la empresa eliminan o ocultan sumariamente contenido sospechoso de infringir las reglas sin una revisión humana. En otras ocasiones, el material señalado por esos sistemas o por los usuarios es evaluado por moderadores de contenido empleados por empresas externas.

Todo ello haciendo una analogía en relación a la economía. Y que nos permite visualizar con un ejemplo, que en los planes de los bancos centrales para emitir versiones digitales de sus divisas no deben tratar a las instituciones comerciales (bancos) como «especies en peligro de extinción», que no pueden gestionar la competencia, algo que ha dicho Jens Weidemann, director del Banco Central Alemán, quien pidió además que el euro digital sea limitado, gradual, para evitar un pánico bancario.

Hoy se habla de la creación de la moneda digital por parte del Banco Central (Reserva Federal), y en esta sección económica que pasará a tener un control total de sobre la población, el ofrecimiento de parte de los BC es que esa moneda digital sea indirecta:

El BC emite una moneda digital que representa una concesión a un intermediario/distribuidores (banco común). Los intermediarios manejan los pagos al por menor y los bancos centrales manejan los pagos al por mayor. Y es la que probablemente elijan para no dejar fuera de juego a los bancos en general y así puedan quedarse con un parte de todo el pastel.