La gran petición de Hunter y el aparente intento de usar la posición de poder de su padre para lograr el acuerdo para Bursima (el gigante del gas ucraniano en cuyo directorio él formaba parte) salieron a la luz solo después de que los registros del Departamento de Estado se publicaran en el New York Times luego de que Joe Biden pusiera fin a su intento de reelección 2024 el mes pasado.
«Quiero tener cuidado de no prometer demasiado», escribió un funcionario del Departamento de Comercio en la Embajada de EEUU en Italia en respuesta a la carta de Hunter de 2016, que no fue publicada.
El funcionario pareció alarmarse por la solicitud y destacó los diversos protocolos existentes que impiden al gobierno de EEUU hacer lobby en nombre de empresas extranjeras.
“Se trata de una empresa ucraniana y, simplemente para protegernos, [el gobierno de EEUU] no debería abogar activamente ante el gobierno de Italia sin que la empresa pase por el Centro de Defensa [del Departamento de Comercio]”, escribió el funcionario.
La revelación se suma a la evidencia que vincula a Hunter con violaciones de la Ley de Registro de Agentes Extranjeros a través de su trabajo para Burisma y varias entidades comerciales.
El fiscal especial David Weiss presentó evidencia de supuestas violaciones de FARA que involucran a Hunter la semana pasada, en una presentación judicial relacionada con su caso de fraude fiscal en California.
La presentación de Weiss afirmó que el empresario rumano Gabriel Popoviciu, condenado en su país natal por soborno en 2016, contrató a Hunter y sus asociados «para intentar influir en las agencias del gobierno estadounidense para que investigaran la investigación criminal rumana de [Popoviciu] y, de ese modo, provocar el fin de la investigación».
Sin embargo, el fiscal especial señaló que a pesar de la evidencia de que Hunter violó las leyes FARA, “[l]a introducción de esa evidencia… no significa que el gobierno también hará referencia a las acusaciones de que el acusado violó FARA y que los contactos con funcionarios del gobierno fueron indebidos; dichas acusaciones no son relevantes para los cargos en este caso fiscal”.
En respuesta al informe del New York Times, el abogado de Hunter, Abbe Lowell, admitió al medio que el primer hijo «pidió ayuda a varias personas» para organizar una presentación entre los ejecutivos de Burisma y Enrico Rossi, presidente de la región de Toscana en Italia, calificándolo de «solicitud apropiada».
Burisma estaba trabajando en ese momento para asegurar la aprobación regulatoria para un proyecto de energía geotérmica en Toscana, según muestran los correos electrónicos de la infame computadora portátil abandonada de Hunter.
“No hubo ninguna reunión, ningún proyecto se materializó, nunca se buscó nada en EEUU y solo se pidió una presentación en Italia”, dijo Lowell al New York Times.
Un portavoz de la Casa Blanca dijo al medio que Joe Biden no sabía que su hijo se había comunicado con la Embajada buscando ayudar a Bursima mientras él era vicepresidente.
Como sugirió Lowell, parece que Hunter puede haberse puesto en contacto con varios funcionarios estadounidenses en su búsqueda de ayuda para conseguir una reunión con Rossi.
“El embajador ya respondió a una carta del señor Biden”, escribió el mismo funcionario del Departamento de Comercio en un correo electrónico a otros funcionarios estadounidenses. “Es posible que esté buscando más apoyo del que recibió aquí”.
El New York Times dijo que obtuvo los documentos del Departamento de Estado después de demandar a la agencia por desobedecer una solicitud de la Ley de Libertad de Información realizada en junio de 2021, y que había recibido pocos documentos relacionados con Hunter hasta el mes pasado, la misma semana en que Joe Biden abandonó la carrera.
Una portavoz del Departamento de Estado dijo al medio que el momento fue una coincidencia.
El juicio de Hunter en Los Ángeles, en el que enfrenta nueve cargos relacionados con delitos fiscales, incluidos tres delitos graves, está programado para comenzar el 5 de septiembre.