El nuevo Republicano Presidente de la Cámara de Representantes resultó ser más de lo mismo

Johnson ahora está desengañando a los Republicanos de la idea de que EEUU está buscando una salida para las guerras regionales en Europa y Oriente Medio. Resonando una de sus frases en la entrevista: «esperamos que no llegue el momento de tener que luchar sobre el terreno si llega el caso».

Johnson ha dejado claro que nada cambiará en términos del apoyo del partido a la guerra por poderes en Ucrania o en términos de poner tropas sobre el terreno en la guerra entre Israel y Hamas. Y resumidamente sus pensamientos expresados son, literalmente:

  • «No podemos permitir que Putin prevalezca en Ucrania»
  • Es posible que se requieran «botas en el terreno» estadounidenses para «apoyar a Israel»
  • Apoya que Israel ataque directamente a Irán
  • Rusia, China e Irán son «el nuevo Eje del Mal»

Conoce al nuevo jefe, igual que el antiguo jefe. Más de lo mismo, pero en tiempos cruciales y de peligro. Entre fundamentalismos y fanatismos religiosos que buscan el Armageddon, más la conjunción de una crisis económica, social, cultural en Occidente, la mezcla perfecta para la hecatombe.

Johnson apareció en “Hannity”, en Fox News, y dejó absolutamente clara la posición del partido sobre estas guerras.

«Ahora no podemos permitir que Vladimir Putin prevalezca en Ucrania porque no creo que se detenga ahí y probablemente alentaría y empoderaría a China para tal vez tomar medidas en Taiwán», afirmó Johnson en un discurso que no difiere en nada con el de un Demócrata.

El Presidente Johnson matizó a continuación que es importante auditar el dinero que fluye hacia Ucrania, demostrando que su preocupación es que efectivamente ese dinero se utilice para la guerra.

“Tenemos estas preocupaciones. No los vamos a abandonar. Queremos ser cooperativos. Necesitamos trabajar juntos en esto, pero le debemos a la gente saber cuál es el plan, dónde se gastará el dinero y necesitamos cierta auditoría de los dólares que ya hemos enviado allí. Estas no son preguntas difíciles, ¿verdad?”.

“Una cosa en la que los Republicanos de la Cámara de Representantes están decididos es que debemos apoyar a nuestro aliado más importante en el Medio Oriente y ese es Israel”, continuó. “Lo haremos, ciertamente esperamos que no llegue el momento de tener que luchar sobre el terreno si llega el caso. Y hoy también comunicamos esto al personal de la Casa Blanca: tenemos el poder del artículo uno en el poder legislativo del gobierno, y ellos tienen el artículo dos”.

“Tienen una autoridad muy limitada sobre lo que pueden hacer para responder sin acudir al Congreso a buscar el consentimiento”, añadió. “E incluso mis colegas demócratas… entienden esto y el Comité de Asuntos Exteriores…”.

La Casa Blanca y los aliados Demócratas de la Cámara de Representantes han resistido la presión del Congreso para que haya transparencia en la financiación.

“La medida, que pedía al Pentágono y al Departamento de Estado que proporcionaran al Congreso documentos sobre la ayuda estadounidense a Ucrania desde la invasión rusa en febrero, fue rechazada por una votación de 26 a 22 en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes”, informó el Washington Times en diciembre.

También existe la preocupación de que las armas destinadas a los combatientes ucranianos terminen en manos de criminales y milicianos de todo el mundo, como ha sucedido en conflictos pasados.

El Presidente Johnson indicó que cree que Irán está vinculado al conflicto Hamás-Israel y que Rusia y China están involucradas.

«Sabemos que Irán está directamente vinculado a todo esto», dijo. “Estos son Hamás y Hezbolá, son representantes de Irán y ahora están vinculados con Rusia y China. Es decir, es un nuevo eje del mal. Así lo vemos nosotros. Y por eso hay que abordarlo”.

La última vez que un líder político estadounidense utilizó el epíteto de “eje del mal”, la nación se disponía a librar una guerra desastrosa en Irak que creó un vacío de poder en el corazón de Medio Oriente y que finalmente condujo al surgimiento de ISIS, con la palpitación cómplice de la CIA en su creación.

«La Cámara ha vuelto a funcionar y vamos a apoyar a Israel», añadió.

El primer deber del Congreso debería ser estar del lado del pueblo estadounidense, «América First».

Mientras el Pentágono anuncia otros U$S 150 millones para la guerra por poderes en Ucrania, los votantes estadounidenses tienen que preguntarse cuándo se apagarán la máquina de guerra y las impresoras de efectivo que la respaldan.

La economía estadounidense está en quiebra. El pueblo estadounidense está sufriendo. No es responsabilidad de esta nación salir al extranjero ‘en busca de monstruos que destruir’.

Estamos, como dijo ElonMusk, «caminando sonámbulos hacia la Tercera Guerra Mundial».

Debido esta incesante intromisión extranjera, están alentando a China, Rusia e Irán a ser más agresivos en la afirmación de su hegemonía regional, mientras cometen el clásico error geopolítico de «exagerar el imperio».

EEUU está estirando su dólar hasta el límite, debido a la financiación de guerras, el servicio de la deuda (casi un billón de dólares por trimestre fiscal) y la interminable expansión del Estado de bienestar burocrático.

Se prevé que la nación acumule más de 140 billones de dólares en deuda para 2053. Esto es completamente insostenible, particularmente en una nación cuyos sectores manufacturero y energético están siendo agotados por políticas “verdes” quijotescas.

EEUU está importando millones de extranjeros ilegales, aproximadamente 8 millones sólo bajo la administración Biden. Esta es la subclase preferida de los Demócratas, un proletariado de habla extranjera para respaldar su «revolución desde arriba».

Esta “revolución” en realidad está revirtiendo el experimento estadounidense de un gobierno limitado que protege constitucionalmente la vida, la libertad y la propiedad de la ciudadanía. Es una revolución en el sentido de que está restaurando el absolutismo de la decadente Europa prerrevolucionaria.

Se trata de erigir una Torre de Babel que está dividida culturalmente en su interior. Debido al subversivo sistema educativo estatal y a las universidades Woke and Broke, incluso los angloparlantes ya no hablan el mismo idioma. Los estadounidenses tradicionales y los analfabetos Wokeisados bien podrían estar viviendo en Dos Américas.

Es muy preocupante que los nuevos dirigentes de la Cámara ya estén dando señales de que no comprenden la urgencia del momento. EEUU necesita una nueva dirección, y rápida.

No podemos luchar por la libertad de otras personas cuando está en riesgo en nuestra propia nación.

Si este Congreso no pone su Cámara en orden, EEUU se encontrará en un declive nacional terminal en un mundo multipolar inestable dominado por potencias despiadadas con armas nucleares.