El magnate de FTX plagado de escándalos, Sam Bankman-Fried, sacó miles de millones de dólares de la compañía de criptomonedas para gastarlos en bienes raíces elegantes, necesidades personales para él y otros e innumerables donaciones políticas, según indican documentos federales.
“Está tomando dinero de los clientes”, dijo John Ray, director ejecutivo de New FTX, al Congreso durante una crítica mordaz de la compañía que tomó de Bankman-Fried “y usarlo para nuestros propios fines”.
Bankman-Fried fue arrestado en las Bahamas el lunes y enfrenta cargos federales en los EEUU semanas después de que FTX se declarara en bancarrota.
Los fondos de FTX incluyeron más de U$S 8 mil millones que se destinaron a la empresa comercial afiliada Alameda Research que Bankman-Fried fundó en 2017 y dirigió con Caroline Ellison, según la denuncia de la SEC – Comisión de Bolsa y Valores (U.S. Securities and Exchange Commission). Faltan entre U$S 1 mil millones y U$S 2 mil millones de esos fondos, informó Reuters.
Los fondos transferidos de FTX al fondo de cobertura Alameda no solo se usaron para el comercio de propiedad de Alameda, sino también para financiar préstamos a Bankman-Fried y otros ejecutivos de FTX, según la presentación de la SEC.
Bankman-Fried, de 30 años, se entregó U$S 1.338 mil millones a través de préstamos personales, según la SEC.
“Entre marzo de 2020 y septiembre de 2022, Bankman-Fried ejecutó pagarés por préstamos de Alameda por un total de más de U$S 1.338 mil millones”, dijo la SEC, “incluidos dos casos en los que Bankman-Fried fue tanto el prestatario en su capacidad individual como el prestamista en su calidad de director ejecutivo de Alameda”.
Otros U$S 300 millones de FTX combinados con Alameda se distribuyeron a bienes raíces de lujo en Bahamas, según los abogados de la compañía en una presentación judicial de bancarrota. Las compras de bienes raíces fueron para él, sus padres y otros ejecutivos de FTX, dijo la SEC.
La SEC alegó que los préstamos a Bankman-Fried y otras personas estaban «poco documentados y, en ocasiones, no estaban documentados en absoluto». Los registros de compra y propiedad de bienes inmuebles también estaban “mal organizados y documentados”.
“Ni el hecho de los préstamos y compras, ni la documentación deficiente de los pasivos y gastos significativos de la empresa fueron revelados a los inversores”, dijo la SEC.
Y Bankman-Fried y otros ejecutivos de la compañía incluso tenían algo de dinero para la política. Las donaciones políticas vinculadas a Bankman-Fried y otros ejecutivos de FTX como Ryan Salame y Nishad Singh inyectaron alrededor de U$S 73 millones en candidatos y causas políticas, según Bloomberg.
Retirar los fondos de la campaña a través de un proceso de quiebra puede ser un proceso extenso y en capas, según el informe de Bloomberg, que depende de múltiples leyes federales y estatales.
Bankman-Fried fue el segundo mayor donante individual de los demócratas detrás del empresario multimillonario George Soros.