La Ley de Orden Público de 1986: se introdujo para gestionar los disturbios públicos, en particular durante los disturbios raciales de la década de 1980. Esta ley se ha utilizado históricamente para evitar que las reuniones físicas se tornen violentas.
Sin embargo, recientemente su aplicación se ha ampliado para abarcar la actividad online, lo que genera preocupación de que ahora la ley se esté utilizando de forma más amplia y agresiva de lo que se pretendía originalmente.
- Uso indebido del artículo 14, Imposición de condiciones a las reuniones públicas: Los manifestantes y periodistas han acusado a la policía en varias ocasiones de abusar de los poderes que le otorga el artículo 14. Durante las protestas de la cumbre del G-20 de Londres de 2009, la policía obligó a los periodistas a abandonar las protestas y los amenazó con arrestarlos. El artículo 14 otorga a la policía la facultad de imponer condiciones a las reuniones «para evitar graves desórdenes públicos, daños criminales graves o perturbaciones graves de la vida de la comunidad». Las condiciones se limitan a especificar:
- el número de personas que pueden participar,
- el lugar de la reunión, y
- Su duración máxima.
- La campaña para reformar la sección 5: La campaña «Reforma del artículo 5» se puso en marcha en mayo de 2012 para conseguir apoyo a una modificación del artículo 5 y condujo a un aumento del umbral de «abusivo o insultante» a «estrictamente abusivo» para las expresiones restringidas por la ley. Se informó de que, sólo en virtud del artículo 5, 51.285 personas fueron condenadas entre 2001 y 2003, 8.489 de las cuales tenían entre 10 y 17 años de edad.
La Ley de Comunicaciones de 2003: regula las comunicaciones electrónicas y penaliza los mensajes considerados «groseramente ofensivos» o amenazantes. Aunque inicialmente se aplicó a casos de acoso online, su uso ha crecido significativamente en la era digital.
Durante los disturbios, se ha invocado esta ley para encarcelar a personas por publicaciones que supuestamente incitaban a la violencia, incluso si no se habían producido daños físicos.
La aplicación más amplia de estas leyes durante los recientes disturbios ha suscitado debates sobre si se trata de un abuso del poder legal. Los críticos argumentan que estas leyes, destinadas a proteger el orden público, se están utilizando para sofocar la libertad de expresión y castigar desproporcionadamente el comportamiento en línea.
Fuentes: Sky News, Yahoo