Los precios de este producto han mostrado un aumento récord en más de una década debido a la disminución de los suministros de India, Brasil, Pakistán y Tailandia. Debido al aumento de los precios del petróleo, las fábricas indias pueden enviar más materia prima de caña a la producción de etanol, informa Bloomberg. Además, debido al aumento de los precios internos, Nueva Delhi podría restringir las exportaciones esta temporada.
Los suministros de Brasil están disminuyendo debido a un aumento en los precios de la gasolina en el país, que también obligó a los consumidores a cambiar a biocombustibles y etanol. Como resultado, una parte importante de la caña de azúcar se destina a la producción de estos bienes y se reduce la oferta para la industria alimentaria.
Según el analista de la consultora Agriturismo Francois Tori, el aumento de los precios del azúcar aumenta el costo de la producción de confitería y pastelería, que ya subió de precio debido al aumento del gasto en energía, combustible y mano de obra. Así, en Reino Unido ya han sentido la subida de precio de los dulces y bebidas.
En Rusia, el coste medio del azúcar aumentó un 27% en 2022. Desde principios de 2023, los precios han seguido subiendo, a pesar del aumento de la producción de remolacha y las restricciones de suministro en el extranjero. El Servicio Federal Antimonopolio (FAS) incluso ha comenzado a controlar la cadena de suministro de azúcar a las tiendas para comprender los aumentos de precios injustificados y la creación de desabastecimientos artificiales.