Crisis política en Perú, se quiebra el gobierno de Castillo

Vladimir Cerrón llamo a la bancada de Perú Libre a negar el voto de confianza al nuevo gabinete de Mirtha Vásquez, esto llevó a la ruptura del bloque oficialista de Castillo.
Luego de que el presidente Pedro Castillo expulsara del gobierno a su jefe de gabinete, Guido Bellido, y lo reemplazara por la progresista Mirtha Vásquez, se desató la guerra entre el mandatario y los jefes del partido oficialista.

Bellido era el representante en el gobierno de Vladimir Cerrón, el líder del partido comunista Perú Libre, que llevó a Castillo a la presidencia. La salida de Bellido significó la ruptura total con Cerrón, y una grieta en la bancada oficialista.

Vladimir Cerrón, anuncio que expulsaran a 15 parlamentarios que son fieles al presidente y los 23 representantes restantes votaran en contra del voto de confianza al nuevo gabinete/gobierno.
En el comunicado, Cerrón indica que cree que hay un “giro político hacia el centro derechismo” del gobierno de Pedro Castillo y su gabinete. “Esta composición la integran partidos sin inscripción, sostenidos por ONGs norteamericanas, quienes han cogobernado con los cuatro últimos gobiernos y ahora con el actual”.

De esta manera, el oficialismo en el Congreso queda compuesto por 15 diputados de Perú Libre alineados a Castillo, 13 de la bancada conservadora de Alianza para el Progreso, 12 del centrista Acción Popular, 5 de la coalición de izquierda Somos Perú – Partido Morado, los 5 de la bancada del izquierdista progresista Juntos por el Perú, y 2 del conservador Podemos. Así, el gobierno queda con solo 52 bancas de las 130 del Congreso, perdiendo su mayoría.

Si el Presidente Castillo no logra el apoyo para este gabinete deberá proponer un nuevo gabinete y esperar la votación del congreso.
Si esto no prospera Pedro Castillo podría llamar a elecciones para intentar desarmar el bloqueo en el Congreso Peruano.

Tal como habíamos anticipado en La Resistencia, la gran cantidad de partidos que habían conseguido bancas serian un dolor de cabeza para la mayoría y podemos observar como el oficialismo se desintegra por conflictos internos.