Los planes para robar el armamento y el equipo fueron interrumpidos por los servicios de inteligencia de Ucrania y finalmente se recuperaron, según el informe, titulado “Responsabilidad del Departamento de Defensa sobre el equipo proporcionado a Ucrania”.
El periodista de investigación estadounidense Seymour Hersh dijo a principios de este año que Occidente es consciente de que el armamento que ha suministrado a Ucrania se vende en el mercado negro.
Pero el informe del inspector general señaló que después de la invasión rusa de Ucrania el año pasado, la capacidad del Departamento de Defensa para rastrear y monitorear todo el equipo estadounidense que llega a Ucrania, como lo exige la ley bajo la Ley de Control de Exportación de Armas, enfrentó «desafíos» debido a la Presencia limitada de EEUU en el país.
Según el informe, que examinó el período de febrero a septiembre de 2022, la Oficina de Cooperación de Defensa de Kiev “no pudo llevar a cabo el [control de uso final] requerido del equipo militar que EEUU proporcionó a Ucrania en el año fiscal 2022”.
“La incapacidad del personal del DoD para visitar las áreas donde se usaba o almacenaba el equipo proporcionado a Ucrania obstaculizó significativamente la capacidad de ODC-Kyiv para ejecutar” el monitoreo, agregó el informe.
El informe está fechado el 6 de octubre de 2022. A fines de octubre, EEUU reanudó las inspecciones in situ de los depósitos de armas ucranianos como una forma de rastrear mejor a dónde iba el equipo. El departamento también ha proporcionado a los ucranianos sistemas de seguimiento, incluidos escáneres y software, dijo a los legisladores en febrero el ex subsecretario de defensa para políticas del Pentágono, Colin Kahl.
Pero el informe subraya lo difícil que fue en los primeros días de la guerra para EEUU rastrear los miles de millones de dólares en armas y equipos que enviaba a Ucrania.
Un portavoz del Departamento de Estado respondió al informe el viernes.
“El gobierno de EEUU sigue siendo muy consciente del riesgo de un posible desvío ilícito y está tomando medidas proactivas para mitigar este riesgo en estrecha cooperación con el gobierno de Ucrania. Somos realistas en cuanto a que estamos enviando armas para ayudar a Ucrania a defenderse en un conflicto activo, y existe el riesgo de que estas armas puedan ser capturadas si el territorio cambia de manos, lo que sucede en cualquier guerra”, dijo el portavoz.
El año pasado, EEUU entregó una amplia gama de armas a Ucrania, incluidos misiles Stinger y Javelin, obuses, lanzagranadas, así como millones de municiones para armas pequeñas. Además, los sistemas más avanzados incluyeron los Sistemas Nacionales Avanzados de Misiles Tierra-Aire (NASAMS), los drones Phoenix Ghost recientemente desarrollados y los Sistemas de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad (HIMARS).
El año pasado la Oficina Nacional de Investigación de Finlandia ha reconocido que muchas de las armas han caído en manos de bandas criminales.
La pregunta ahora es ¿a dónde, a qué países, a qué bandas criminales fueron a parar estos armamentos?. Probablemente muchos tengan sus respuestas aproximadas y dependiendo del lugar donde viven.