La diputada, Mónica Rodríguez Della Vecchia, presentó una reforma al Código Penal en el Congreso de Puebla. Bajo la cual se castigue a quien someta, condicione, coaccione, presione u obligue a menores de edad a cambiar o modificar su identidad sexual en contraposición a su identidad biológica con una pena de uno a tres años de cárcel.
Durante su exposición, la diputada expresó: “¿Por qué pensar que un menor, en edades tempranas, tendrá la madurez para decidir sobre su identidad sexual? Tengamos en cuenta que una decisión del tipo que discutimos afecta a la persona para toda la vida. (…) Muchos piensan que un niño de ocho años puede decidir cambiarse el género, esto es ridículo. No es congruente y por supuesto que nosotros queremos que los niños crezcan siendo niños, que los adolescentes crezcan siendo adolescentes”.
Por otro lado, días atrás, la diputada América Rangel presentó su iniciativa de ley, en la cdmx, para prohibir que los menores de edad se sometan a tratamientos y cirugías de cambio de género. Además, contempla la pena de prisión, de dos a siete años, para el adulto que presione, convenza u obligue a un menor a realizarse un tratamiento o cirugía para cambiar el género con el que nació. También se contempla una pena de tres a diez años al adulto que realice estos procedimientos en menores.
La diputada expresó: “Los activistas de la ideología de género lograron que la sociedad viera con naturalidad que los menores se sometan a tratamientos hormonales y cirugías para cambiar el sexo o reasignar el género. Los tratamientos hormonales los hará dependientes de los fármacos por el resto de sus vidas. En muchos casos, con efectos irreversibles (…) Un menor no puede fumar pero ¿si puede hormonizarse? El Estado financia esto. Aquí en la Ciudad de México, la Secretaría de Salud, a través de la Unidad de Salud Integral para Personas Trans, hormoniza a más de 1000 menores de edad al año. Hay que velar por el interés superior del niño”.
Ambas iniciativas son impulsadas bajo el lema: Ley ConLosNiñosNO