
Según el informe, la República Federal de Alemania descendió ligeramente del décimo al undécimo puesto. Según RSF, el motivo de esta valoración es, entre otras cosas, el «ambiente de trabajo cada vez más hostil» para los profesionales de los medios de comunicación en este país.
Noruega sigue siendo líder y modelo a seguir en el ranking mundial, seguida de Estonia y los Países Bajos. En la parte inferior de la escala, en las posiciones 178 a 180, se encuentran China, Corea del Norte y Eritrea. RSF publica la lista este viernes, justo antes del Día Internacional de la Libertad de Prensa, el 3 de mayo.
“La situación mundial de la libertad de prensa estará en su nivel más bajo histórico en 2025”, concluye la organización. “Más de la mitad de la población mundial vive en países con una situación ‘muy grave’.” Europa sigue siendo la región del mundo donde los periodistas pueden informar con mayor libertad.
La situación sólo puede calificarse de “buena” en siete países, todos ellos europeos. “Además de una frágil situación de seguridad y un creciente autoritarismo, la presión económica está causando problemas a los medios de comunicación en todo el mundo”.
Aunque Alemania obtiene buenos resultados en comparación con el resto del mundo, todavía existen desafíos visibles. En 2024, los periodistas que trataban con círculos y partidos como AfD volvieron a estar en peligro: informaron sobre marcas enemigas, amenazas, insultos y miedo a la violencia física.
El clima también se ha vuelto más tenso a nivel editorial, critica Reporteros sin Fronteras. Hay documentados “numerosos casos en los que los profesionales de los medios informaron sobre obstáculos desproporcionadamente altos a la hora de informar sobre el conflicto de Oriente Medio”. También en Alemania la situación económica de los medios de comunicación ha empeorado sensiblemente.
En 160 de 180 países, los medios de comunicación tienen importantes problemas financieros
“Más de la mitad de la población mundial vive actualmente en países donde consideramos que la situación de la libertad de prensa es muy grave”, afirma la directora ejecutiva de RSF, Anja Osterhaus. “Los autócratas consideran que el periodismo independiente es una espina en su costado”.
Esto también afecta su viabilidad económica. Si los medios de comunicación sufren una grave crisis financiera, ¿Quién denunciará la desinformación y la propaganda?. Además de nuestra lucha diaria por la seguridad de los periodistas, también nos comprometemos a fortalecer las bases económicas del periodismo. En 160 países del mundo los medios de comunicación apenas podrían funcionar de manera sostenible.
El Índice de Libertad de Prensa evalúa la situación de un país o territorio en cinco categorías: política, derecho, economía, sociocultural y seguridad. En el ámbito económico, los países en su conjunto han obtenido las puntuaciones más bajas de los últimos años.