La resolución, que fue adoptada en la reunión del Consejo de la FIDE, fue publicada el pasado lunes, 14 de agosto, y establece que aquellas personas que pasaron de género «masculino a femenino» no tendrán «derecho a a participar» en torneos de mujeres durante un plazo máximo de dos años.
Las nuevas normas entrarán en vigor el 21 de agosto, y cualquier hombre transgénero que haya ganado torneos femeninos antes de la transición perderá esos títulos, que pueden «transferirse a un título general del mismo nivel o inferior». Sin embargo, pueden ser restituidos en caso de que vuelva a modificar su género. En cambio, las mujeres trans podrán mantener sus títulos.
La medida de la FIDE ha suscitado críticas, como la de Yosha Iglesias, una entrenadora francesa, que la definió como «regulaciones anti trans». «Así que la FIDE acaba de publicar una lista de regulaciones anti trans, como si fuera ‘la mayor amenaza de las mujeres en el ajedrez'», expresó en X, red social antes conocida como Twitter.
So FIDE just published (yesterday) a list of anti-trans regulations, like it was "the biggest threat of women in chess".
Can someone tell me what qualifies as an official FIDE event? Will I be allowed to play the French Championship in 3 days? The European Club Cup in September? pic.twitter.com/tGBbVhgnkY
— Yosha Iglesias (@IglesiasYosha) August 15, 2023
Este paso se suma a la tendencia creciente en el deporte mundial de revisar las reglas y cumplir en relación con la participación de personas transgénero en las competiciones específicas de género. En los últimos años, disciplinas como el atletismo, la natación y el rugby han implementado restricciones similares, argumentando la necesidad de garantizar una competencia justa y equitativa.