
Patrushev, quien anteriormente se desempeñó como secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, hizo el comentario en una entrevista con la agencia de noticias del Kremlin Tass.
Patrushev, uno de los aliados más cercanos de Putin, trabajó anteriormente junto al líder ruso en la KGB en San Petersburgo. Es un destacado defensor de las políticas de línea dura del Kremlin y ha defendido públicamente la decisión de Putin de lanzar la invasión a gran escala de Ucrania. Considerado con frecuencia como el sucesor más probable de Putin, sus opiniones se consideran ampliamente alineadas con las del presidente.
Kaliningrado es una ciudad portuaria rusa de importancia estratégica en la costa sur del Mar Báltico. Es un territorio separado del resto de Rusia y limita con Lituania y Polonia, países miembros de la OTAN.
Patrushev afirmó que las fuerzas de la OTAN están ensayando activamente la captura de la región bajo el pretexto de ejercicios militares rutinarios en el Mar Báltico.
En junio pasado, alrededor de 9.000 soldados de 20 países de la OTAN participaron en ejercicios en la zona, que incluyeron detección de submarinos, barrido de minas marinas, desembarcos y respuesta médica ante escenarios de víctimas masivas.
Y esta semana, el ejercicio de búsqueda y rescate marítimo de la OTAN, Dynamic Mercy, comenzó en el Mar Báltico.
Patrushev había acusado anteriormente a Occidente de intentar aislar logísticamente a Kaliningrado.
«Los países occidentales intentan complicar al máximo el tránsito de mercancías y pasajeros hacia Kaliningrado para aislar la región e interrumpir las conexiones de transporte con el resto de Rusia», declaró Patrushev el pasado otoño, según informó Tass.
Las declaraciones de Patrushev se producen en un momento de creciente tensión entre Rusia y Occidente, impulsada en gran medida por la guerra en Ucrania. Las agencias de inteligencia occidentales han advertido cada vez más sobre el creciente riesgo de una confrontación directa entre Rusia y la OTAN en un futuro próximo.
Mientras tanto, en una demostración de fuerza, Rusia llevó a cabo ejercicios militares en las costas de Kaliningrado en las últimas semanas, practicando el uso de misiles hipersónicos para repeler un asalto aéreo y marítimo simulado.
Nikolai Patrushev declaró a Tass en una entrevista publicada el martes: «Por segundo año consecutivo, la OTAN está realizando los ejercicios más grandes en décadas cerca de nuestras fronteras, donde practica escenarios de acciones ofensivas en una amplia zona: desde Vilna hasta Odesa, la toma de la región de Kaliningrado, el bloqueo del transporte marítimo en los mares Báltico y Negro, y ataques preventivos contra las bases permanentes de las fuerzas de disuasión nuclear rusas».
Rusia y Bielorrusia planean realizar un ejercicio estratégico conjunto este otoño en septiembre, denominado Zapad 2025. Se espera que «simule un conflicto a gran escala con la OTAN y probablemente incluya ciberataques, señalización nuclear y presión en el mar Báltico y el Alto Norte», según el grupo de expertos Centro de Análisis de Políticas Europeas.