Se impone el toque de queda en varias partes de la capital de Sri Lanka, Colombo, debido a las fuertes protestas contra el gobierno por la crisis energética y económica. Los manifestantes han intentado tomar la residencia del Presidente Gotabaya Rajapaksa.
Las protestas se producen cuando Sri Lanka atraviesa una profunda crisis económica y energética. Colombo ha pedido ayuda financiera a India, China y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para poder pagar productos de primera necesidad como diésel o medicamentos.
Cerca de 11 partidos relacionados con el oficialismo llamaron a Rajapaksa a disolver su Gabinete y formar un Gobierno provisional con el consentimiento de las organizaciones políticas.
La isla ubicada al sur de la india sufre una crisis de divisas causada por el varapalo que ha significado la pandemia de la COVID-19 al turismo, uno de los sectores más importantes de la nación.
El turismo y las remesas de la diáspora, fundamentales para la economía de Sri Lanka, se derrumbaron durante la pandemia, y el gobierno impuso una amplia prohibición de las importaciones para frenar la sangría de divisas extranjeras.
Sri Lanka sufrió el 29 de marzo 10 horas de cortes eléctricos por la escasez de combustible y de divisas. El presidente de Public Utilities reconoce que no han podido pagar 52 millones de dólares por un cargamento de diésel.
Los cortes de electricidad también se producen debido a la escasa producción de energía hidroeléctrica provocada por el bajo nivel de los embalses. Aproximadamente el 40% de la energía que se consume procede de esta fuente.
En marzo la inflación superó en cerca de un 19% a la registrada en el mismo periodo de 2021, mientras que ese mismo factor alcanzó un 30,2% en los alimentos, según estadísticas oficiales.
La escasez de suministros ha causado estragos en casi todos los aspectos de la vida cotidiana, hace poco las autoridades aplazaron los exámenes trimestrales de millones de estudiantes por falta de papel y tinta y 2 importantes periódicos suspendieron sus ediciones impresas.
El Presidente de Sri Lanka declaró el Estado de Emergencia tras las protestas del 31 de marzo. Gotabaya Rajapaksa culpó a «extremistas organizados» dentro de los manifestantes por «la violencia» y calificó la protesta en su residencia de «acto de terrorismo».
India suministrará 40.000 toneladas de diésel y 40.000 toneladas de arroz a Sri Lanka en un intento de aliviar la crisis alimentaria y energética que atraviesa el país.
Sri Lanka impuso el 2 de abril un toque de queda de 36 horas, desde las 18:00 del sábado hasta las 06:00 del lunes, para mantener el orden público y proteger los servicios esenciales, según asegura el gobierno.
