Por – PATRICIA SOPRANO
En el año 1977, la natalidad era del 25,32% y el índice de fecundidad era del 3,36.
En el 2020 (últimos datos disponibles) la natalidad descendió al 16,64% y la fecundidad al 2,23.
Esto quiere decir que desde hace 43 años se detecta la formación de una curva descendente en lo que respecta tanto a la natalidad como a la fecundidad.
En el caso particular de Argentina, la “fecundidad de reemplazo” se ubica en el orden de 2,1 hijos de media. Es decir, que aún la pirámide de población se mantiene estable, pero de continuar esta tendencia en los próximos años, el país se acerca más a un escenario de inestabilidad que de estabilidad.
Vale la pena mencionar, que los nacimientos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires descendieron un 40% y que, por dicho motivo, comenzaron a reducirse y a cerrar varias áreas de maternidad en los centros de salud porteños.
Respecto a ello, Leonardo Mezzabotta, vicepresidente de la Sociedad de Ginecología y Obstetricia de Buenos Aires, expresó: “Hoy, las maternidades públicas y privadas tienen la mitad de los nacimientos que registraban en 2015”.
Varios son los motivos que pueden explicar este descenso: los cambios en los estilos de vida, la alimentación, planificación familiar, cambios culturales/sociales y medidas de control poblacional nacionales e internacionales (Agenda 2030).
Datos obtenidos de Datosmacro.expansion.com