Jeffries, de 80 años, quien está libre tras pagar una fianza de U$S 10 millones, respondió a 16 cargos (un cargo de tráfico sexual y 15 cargos de prostitución interestatal) en el tribunal federal de Central Islip con su esposa y su hijo en la galería.
El magistrado Steven Tiscione emitió una severa advertencia sobre las condiciones de la fianza del jefe de la moda caído en desgracia, que incluyen arresto domiciliario.
“Señor Jeffries, está poniendo a su familia en riesgo financiero si no regresa a la corte”, dijo.
La fianza de U$S 10 millones de Jeffries está garantizada por su esposa y su hijo, y en parte por la casa de la pareja en Fisher Island, en New York.
También recibieron una reprimenda de Tiscione, quien les advirtió: “Si el acusado no se presenta ante el tribunal, su casa será embargada” y “deberán al gobierno U$S 10 millones”.
Jeffries, quien dejó la empresa de ropa en 2014 después de 22 años, está acusado junto con su pareja romántica Matthew Smith, de 61 años, y el presunto intermediario, James Jacobson, de 71, de atraer al menos a 15 jóvenes aspirantes a modelos a fiestas sexuales en todo el mundo donde Jeffries y Smith abusaron sexualmente de ellos, según alegan los fiscales.
Jacobson, quien también se declaró inocente el viernes y debe permanecer en arresto domiciliario, está acusado de reclutar a los jóvenes con la promesa de ayudarlos a impulsar sus carreras de modelos o incluso conseguirles trabajo como modelos de A&F, afirman los federales.
También se ordenó a Jacobson y Jeffries que se mantuvieran alejados de los coacusados, de los testigos y de las víctimas, todos ellos identificados anónimamente en los documentos judiciales como John Doe.
En un momento dado, el abogado de Jacobson, Jeremy Schneider, le dijo al juez que su cliente podría entrar en contacto accidentalmente con una de estas personas, lo que provocó que Tiscione respondiera con dureza: «Creo que su cliente tiene una buena idea de quiénes son».
Después de la audiencia, Jeffries y sus abogados se marcharon sin hacer comentarios. Pero una ex empleada corporativa de A&F, Carmen O’Connor, dijo a los periodistas fuera de la sala del tribunal que «sabía que este día llegaría».
Los fiscales afirman que Jacobson seleccionaba a los candidatos pidiéndoles que primero realizaran actos sexuales con él para probarlos en relación con los planes enfermizos de Jeffries y Smith y luego Smith tenía que aprobar a los candidatos que Jacobson le recomendaba, según documentos judiciales.
Las víctimas, que tenían hasta 19 años, a menudo eran sometidas a dolorosas inyecciones en el pene para inducir erecciones y soportaban la inserción de grandes objetos en sus anos y enemas de alta presión administrados mediante una manguera, alegan los fiscales.
Los hombres recibieron drogas y lubricante, y Jeffries y otros les afeitaron los genitales para prepararlos para los llamados «eventos sexuales» que tuvieron lugar en las casas de Jeffries en Manhattan y en los Hamptons y en hoteles de todo el mundo, afirman los federales.
Jeffries y Smith invirtieron millones de dólares en la operación de tráfico sexual y prostitución que tuvo lugar al menos desde 2008 hasta 2015, según documentos judiciales.
El trío de acusados compareció por primera vez ante el tribunal a principios de la semana pasada, donde Jeffries fue liberado por un juez de Florida con una fianza de U$S 10 millones con monitoreo electrónico a través de un monitor de tobillo GPS y Jacobson fue liberado con una fianza de U$S 500.000 por un juez en St. Paul, Minnesota.
Aún no se ha programado una comparecencia formal para Smith, nativo del Reino Unido, ya que fue detenido sin derecho a fianza en un tribunal federal de Florida el martes debido a que existe un supuesto riesgo de fuga y aún debe ser transportado a New York para comparecer en el caso.