
Exfuncionarios de la administración Trump y otros partidarios del presunto candidato republicano han discutido en los últimos meses una variedad de propuestas, desde cambios graduales de política hasta una afirmación improbable de que el propio presidente debería desempeñar un papel en la fijación de las tasas de interés. Un pequeño grupo de aliados del presidente, cuyo trabajo es tan secreto que incluso algunos destacados ex asesores económicos de Trump no estaban al tanto de él, ha elaborado un documento de aproximadamente 10 páginas que describe una visión política para el banco central, según personas familiarizadas con el asunto.
El grupo de aliados de Trump sostiene que se le debería consultar sobre las decisiones sobre tasas de interés, y el borrador del documento recomienda someter las regulaciones de la Fed a la revisión de la Casa Blanca y utilizar más enérgicamente al Departamento del Tesoro como control del banco central. El grupo también sostiene que Trump, si regresa a la Casa Blanca, tendría autoridad para destituir a Jerome Powell como presidente de la Reserva Federal antes de que termine su mandato de cuatro años en 2026, dijeron personas familiarizadas con el asunto, aunque Powell probablemente permanecería en el cargo con la junta de gobernadores de la Reserva Federal.
No se pudo determinar si Trump está al tanto del esfuerzo o lo aprobó, pero algunas personas cercanas a las discusiones creen que el trabajo ha recibido la bendición del expresidente.
«Seamos muy específicos aquí: a menos que un mensaje provenga directamente del presidente Trump o de un miembro autorizado de su equipo de campaña, ningún aspecto de la futura dotación de personal presidencial o anuncios de políticas debe considerarse oficial», dijeron los asesores principales de Trump, Susie Wiles y Chris LaCivita.
Trump, que a menudo les dice a sus asesores que ama las bajas tasas de interés y expresó su frustración por no poder influir en ellos como presidente, aún no ha decidido exactamente cómo abordaría a la Reserva Federal en un segundo mandato, dijeron personas cercanas a él. Está centrado principalmente en las próximas elecciones, sus continuos problemas legales y su búsqueda de un compañero de fórmula. Pero ha tenido conversaciones informales con asesores sobre posibles candidatos para dirigir el banco central y ha preguntado a sus asociados si estarían interesados en el puesto, dijeron las personas. Trump se ha quejado repetidamente –en público y en privado– de Powell, continuando una campaña de años para desacreditar al hombre que eligió para dirigir la Reserva Federal.