La Casa Blanca se está preparando para un creciente ejército de personal para defenderse de posibles investigaciones dirigidas por los republicanos sobre todo, desde Hunter Biden hasta la retirada de EEUU de Afganistán, y los contribuyentes están pagando la factura.
Cerrando las escotillas en caso de que el Partido Republicano recupere el control de la Cámara de Representantes en las elecciones de mitad de período, la Casa Blanca está desembolsando U$S 265.000 al año en salarios para el personal cuya cartera principal será administrar las comunicaciones y la defensa para la administración de una tormenta de nieve de citaciones que se aproxima.
En mayo, la Casa Blanca contrató furtivamente a Richard A. Sauber, el principal abogado del Departamento de Asuntos de Veteranos, para que sirviera como “asesor adjunto del presidente” encargado de manejar las investigaciones de supervisión de la Cámara. Ian Sams, un veterano de la fallida campaña presidencial de 2020 del vicepresidente Harris, fue contratado para realizar las comunicaciones oficiales del equipo. Los registros de la Casa Blanca muestran que los dos hombres se llevarán a casa U$S 155.000 y U$S 110.000 respectivamente.
Y solo se espera que el equipo crezca, informó el Washington Post, lo que indica que sus gastos operativos y de personal se dispararán aún más.
“Los estadounidenses merecen transparencia del presidente Biden sobre los tratos comerciales sospechosos de su familia. Pero en lugar de brindar transparencia, la Casa Blanca está contratando personal a expensas de los contribuyentes estadounidenses para obstruir la supervisión y la rendición de cuentas del Congreso”, dijo el representante James Comer (R-Ky.), quien está en camino de presidir el Comité de Supervisión de la Cámara el próximo año si los republicanos retoman la Cámara.
“Seamos claros: ninguna cantidad de personal de Biden en la Casa Blanca o obstrucciones detendrá la búsqueda de transparencia y responsabilidad de los republicanos en nombre del pueblo estadounidense”, agregó.
Los republicanos de la Cámara han prometido investigar todo, desde los orígenes del coronavirus hasta la retirada fallida de las fuerzas estadounidenses de Afganistán. La investigación principal del partido se centrará en Hunter Biden y qué conexiones tenía su padre, el presidente Biden, con sus negocios turbios en el extranjero.
El presidente Biden ha negado constantemente tales conexiones, incluso cuando se ha acumulado un creciente cuerpo de evidencia que indica que ese no es el caso.