Enfrentará a Gabriel Boric Font en la Segunda Vuelta del próximo 19 de diciembre. “No queremos ir en la ruta de Cuba y Venezuela”, afirmó.
El ganador de la primera vuelta aseguró que el futuro va a ser mucho mejor tras el ballotage del 19 de diciembre.
“Vamos a elegir entre libertad y comunismo. No queremos ir en la ruta de Cuba y Venezuela».
“Hoy entre todos hemos interpretado a una mayoría que quiere un país tranquilo y seguro. Y a partir de mañana tenemos un nuevo desafío y hay que multiplicar la energía. Hay que convocar a más personas. Tenemos que ir por todos aquellos que no se atrevieron a votar por nosotros, que no se atrevieron a dar ese paso», dijo.
Desde su comando y en medio de celebraciones, el candidato del Frente Social Cristiano llamó a recuperar el país “para todos”.
“Quiero agradecerle a cada chileno y chilena que hoy confió en nosotros, no los vamos a defraudar, vamos seguir caminando, vamos a recuperar la paz, el orden y el progreso”, prometió.
“Yo creo que corresponde es darle gracias a Dios, por cómo se desarrolló todo hasta ahora, es un regalo increíble saber que todo ha sido tranquilo y esperamos que siga siendo tranquilo. este es un camino que partimos hace mucho tiempo, no exento de sacrificios, pero valió la pena, hoy estamos en representación de millones de chilenos que miran con esperanza el futuro”.
«Vamos a trabajar para recuperar el orden, el trabajo y el progreso, a liberarnos de la corrupción, el narcotráfico y el terrorismo», explicó el candidato en la sede de su comando en Santiago ante una multitud.
El abogado católico de 55 años, casado y padre de nueve hijos, se refirió al conflicto mapuche que sacude al sur del país y dijo que un eventual gobierno suyo combatiría el narcotráfico y la delincuencia. Durante su extenso discurso también saludó al candidato de la centroderecha oficialista, Sebastián Sichel, en un guiño a los votantes más moderados.
Kast registró el 28,1 % de los sufragios y se enfrentará en el ballotage del 19 de diciembre con el candidato de izquierda Gabriel Boric, quien obtuvo casi 25,5 % de los votos, lo que significa que es la primera vez desde al retorno a la democracia, en 1990, que los partidos tradicionales de centroizquierda y centroderecha se quedan fuera.