El príncipe Andrew esperaba que un juez de New York desestimase la demanda por abuso sexual interpuesta el año pasado por Virginia Giuffre, se ha frustrado después de que el magistrado decidiera este miércoles rechazar la moción. La defensa argumentaba que el duque de York era intocable debido a que el acuerdo económico que la demandante había alcanzado en 2009 con el fallecido magnate Jeffrey Epstein, protegía también al príncipe. La demanda debe ser “denegada en todos sus aspectos”, ha declarado sin lugar a dudas el juez Lewis Kaplan.
El 3 de enero se publicó el acuerdo legal al que en noviembre de 2009 había llegado la víctima (que entonces se llamaba Virginia Roberts) por el que recibía 500.000 dólares (371.000 libras esterlinas) a cambio de abandonar el caso para no llegar a juicio por haber sido manejada y explotada sexualmente cuando era una menor de 17 años por Epstein y por su amante y facilitadora de adolescentes, Ghislaine Maxwell.
Roberts Giuffre afirma que fue obligada a tener relaciones sexuales con Andrew en 2001. Foto que aparece en 2011. Andrew dijo que no recuerda la conocida fotografía de él con su brazo alrededor de la cintura de Virginia en la casa de Maxwell, y ha cuestionado si la foto había sido manipulada.
Esto representa un dugolpe para la realeza que ha negado enérgicamente las acusaciones hechas por la Sra. Giuffre.
En una entrevista con la BBC, él negó haberla conocido y, si comparece ante el tribunal, seguramente será interrogado bajo juramento sobre esa afirmación. El caso también es una gran vergüenza para la familia real, ya que la Reina se prepara para celebrar su Jubileo de Platino.
Los abogados del príncipe Andrew argumentaron que él estaba cubierto por una parte del acuerdo en el que ella también acordó no demandar a «ninguna otra persona o entidad que pudiera haber sido incluida como posible demandada».
Pero David Boies, el abogado de la Sra. Giuffre, dijo que solo las partes del acuerdo de conciliación, Epstein y la Sra. Giuffre y sus asociados, podrían beneficiarse de él, y no un «tercero» como Andrew.
El juez Lewis A. Kaplan estuvo de acuerdo y dijo que el acuerdo de 2009 no puede «demostrar, clara e inequívocamente» que las partes tenían la intención de «beneficiar al Príncipe Andrew».
En esta etapa, no está claro si Andrew testificará en persona, a través de un enlace de video o si se negará a participar.
El duque podría enfrentarse a un juicio en el que podría tener que dar una declaración ante un tribunal de los EEUU, y un desfile de testigos hablaría sobre las acusaciones.
La amistad del duque de York, de 61 años, con el financiero Jeffrey Epstein, que según Giuffre empezó en 1999 cuando los presentó Ghislaine Maxwell, está siendo un quebradero de cabeza para el segundo hijo de la reina de Inglaterra, Isabel II.
Virginia afirma que temió por su vida cuando supuestamente la obligaron a tener relaciones sexuales con Andrew, a quien se acusa de haber estado al tanto de su edad y condición de «víctima de tráfico sexual».
Los documentos judiciales afirman que la Sra. Giuffre fue «prestada con fines sexuales» por el delincuente sexual convicto Epstein, incluso cuando aún era menor de edad según la ley de los EE. UU.
Los documentos agregan que las supuestas agresiones «le han causado, y continúan causándole, angustia y daño emocional y psicológico significativo».
«Las acciones del príncipe Andrew, descritas anteriormente, constituyen una conducta extrema e indignante que conmociona la conciencia», afirma la demanda al describir la angustia emocional sufrida por la Sra. Giuffre.
“El abuso sexual del príncipe Andrew de una niña que sabía que era víctima de tráfico sexual, y cuando tenía aproximadamente 40 años, va más allá de todos los límites posibles de la decencia y es intolerable en una comunidad civilizada”, agregó.
Virginia Roberts está casada y reside en Australia, es una de las 30 mujeres que alzaron la voz para denunciar los delitos de tráfico de menores de Epstein, quien se suicidó a los 66 años en su celda en 2019 a la espera de un proceso judicial por delitos de sexo con menores.
Si todos los recursos de Andrés fracasan, un juicio civil podría tener lugar “entre septiembre y diciembre” próximos, adelantó en noviembre pasado el juez Kaplan.