
Mike Johnson, expresó profunda preocupación por la crisis humanitaria en Gaza, calificando el «sufrimiento y la miseria» que se vive allí como algo “bastante alarmante de ver”.
Johnson describió como “perturbadoras y desgarradoras” las imágenes de hambre en Gaza, pero afirmó que “Hamas ha robado una enorme cantidad de comida”, acusando al grupo de haberse beneficiado con más de 500 millones de dólares en ayuda alimentaria en 2024, equivalente a la mitad de su presupuesto. Según él, Israel había enviado 94.000 camiones de alimentos desde marzo de 2025—lo suficiente para alimentar a 2 millones de personas durante dos años—y pidió que la ONU trabajara con Israel para asegurar la distribución del suministro.
Sin embargo, para alimentar a la población de Gaza con una dieta básica y suficiente, se necesitarían en torno a 380-400 camiones cargados con alimentos al día. En términos de peso, para una dieta básica se calcula aproximadamente 2 a 3 kg de alimentos por persona por día (considerando agua incluida en frutas y verduras, alimentos secos y procesados). Para 2.3 millones de personas: 2.3 millones × 2.5 kg (promedio) = 5,750 toneladas de alimentos por día. Un camión típico de carga para ayuda humanitaria puede transportar entre 10 y 20 toneladas, dependiendo del tipo. Tomemos 15 toneladas como promedio por camión.
Aún así, el cálculo es muy general y simplificado. No incluye necesidades de agua potable, medicinas, ni otros insumos básicos. Tampoco considera pérdidas, distribución interna, o reservas.
Entrevistado por el programa NBC Meet the Press, Johnson recalcó su preocupación por que el caos en Gaza bloquee la ayuda humanitaria. Afirmó que Israel sigue intentando proveer alimentos según acuerdos anteriores, pero insistió en que el problema era la corrupción interna en Gaza (es decir, el saqueo del suministro) y no el bloqueo per se.
Aunque no se centró únicamente en Gaza, sus declaraciones del 22 de julio vinculadas a otras zonas de conflicto reflejan su postura general: pidió el fin de la guerra y expresó preocupación por el amplio número de muertes civiles, señalando que “mueren demasiadas personas inocentes” y rechazó que EEUU se involucrara militarmente más allá de su rol actual.
El 27 de julio, el ejército israelí anunció “pausas tácticas” del combate en varias regiones (Al‑Mawasi, Deir al‑Balah y Gaza) con corredores seguros para la entrega de ayuda de 6 a.m. a 11 p.m., en respuesta a la escalada del hambre y muertes por desnutrición y proyectiles.