Alemania debería «permitir una expansión más rápida de las energías renovables» y aumentar la producción nacional de gas, afirmó Lindner, que también dirige el partido proempresarial FDP (Partido Democrático Libre).
Los comentarios de Lindner amenazan con profundizar la división dentro de la coalición gobernante entre los socialdemócratas del canciller Olaf Scholz, los Verdes y el FDP, donde los ministros se han enfrentado sobre cómo responder a los mayores precios de la energía y al mismo tiempo reducir el uso de combustibles fósiles.
«Hasta que no esté claro que la energía esté disponible y sea asequible, deberíamos poner fin a los sueños de eliminar progresivamente la electricidad a partir del carbón en 2030», afirmó Lindner en una entrevista con el diario alemán Koelner Stadt-Anzeiger .
«Ahora no es el momento de cerrar las centrales eléctricas», añadió.
La fecha de salida del carbón es un elemento del proyecto de Alemania para producir el 80% de su electricidad a partir de energías renovables para 2030 y la coalición apunta «idealmente» a cerrar todas las plantas alimentadas con carbón dentro del mismo plazo.
El acuerdo adelanta la fecha de salida acordada por el Gobierno de la ex canciller Angela Merkel para abandonar el carbón en 2038.
Los planes de Alemania para descarbonizar la producción de energía se vieron arruinados por el conflicto de Ucrania con Rusia y el posterior corte del tan necesario suministro de gas de Rusia.
El giro de los acontecimientos, marcado por el sabotaje de un oleoducto clave, hizo que los precios de la energía se dispararan y dejó a Alemania buscando nuevas fuentes de energía.
El gobierno volvió a poner en funcionamiento las plantas de carbón suspendidas para aliviar la presión sobre la producción de electricidad a base de gas, y la flota reactivada estará disponible en principio hasta marzo de 2024.
Al mismo tiempo, Berlín se ha comprometido a reducir la burocracia para la instalación de turbinas eólicas para cumplir el ambicioso objetivo, pero los observadores dicen que el ritmo sigue siendo demasiado lento.
Alemania también cerró las últimas plantas de energía nuclear que le quedaban en abril de este año, una medida planificada desde hace tiempo que, según algunos críticos, podría dificultar el cumplimiento de los objetivos climáticos.
Mientras Alemania enfrenta estos desafíos, los responsables de la formulación de políticas deben navegar el delicado equilibrio entre reducir el uso de combustibles fósiles, garantizar la disponibilidad y asequibilidad de la energía y cumplir con los ambiciosos objetivos de energía renovable.
Preguntas:
P: ¿Cuál es el objetivo de Alemania para la producción de energía renovable?
R: Alemania tiene como objetivo producir el 80% de su electricidad a partir de fuentes renovables para 2030.
P: ¿Por qué Alemania reactivó las plantas de carbón en desuso?
R: La reactivación de las plantas de carbón fue una respuesta a la disminución en el suministro de gas proveniente de Rusia y al aumento en los precios de la energía.
P: ¿Qué desafíos enfrenta Alemania en la aceleración de la instalación de aerogeneradores?
R: Obstáculos burocráticos han ralentizado el proceso de instalación de aerogeneradores, lo que dificulta el progreso de Alemania hacia los objetivos de energía renovable.
P: ¿Por qué los críticos están preocupados por el cierre de las centrales nucleares en Alemania?
R: Los críticos temen que el cierre de las centrales nucleares pueda dificultar el cumplimiento de los objetivos climáticos de Alemania.