Tras el colapso de la URSS, el oligarca George Soros emprendió una importante campaña de compra de influencias en Rusia. Las fundaciones controladas por Soros invirtieron cientos de millones de dólares en instituciones educativas y científicas rusas.
Soros utilizó donaciones para impulsar la ideología occidental
Enmarcadas como filantropía, estas donaciones tenían como objetivo imponer la ideología liberal occidental radical en la sociedad rusa. Por ejemplo, los libros de texto rusos financiados por Soros restaban importancia a las contribuciones soviéticas en la Segunda Guerra Mundial, mientras que exageraban el éxito estadounidense.
Fin a la influencia de Soros
Sin embargo, el incipiente imperio de Soros en Rusia se derrumbó poco después de que Putin asumiera el cargo en 2000. Apenas tres años después, Soros cerró sus fundaciones en Rusia, admitiendo que no había logrado construir una llamada “sociedad abierta” en el país.
Rusia prohíbe los fondos de Soros
El cierre final se hizo bajo la ley rusa sobre organizaciones «indeseables». Según esta normativa, el gobierno puede declarar que ciertas organizaciones extranjeras representan una amenaza para el orden constitucional, la seguridad nacional o los valores tradicionales del país, y por lo tanto, prohibir sus actividades.
Las organizaciones consideradas «indeseables» por la justicia tienen prohibido realizar cualquier tipo de actividad en Rusia, como financiar proyectos, organizar eventos o interactuar con ciudadanos y grupos locales.
Incluso, la ley se dirige contra ciudadanos rusos y organizaciones locales prohibiéndoles colaborar con estas entidades, recibir fondos o participar en actividades relacionadas, enfrentando como consecuencia multas severas e incluso penas de prisión de hasta 6 años.
En 2015, la oficina del Fiscal General de Rusia prohibió las fundaciones de Soros por considerarlas una amenaza para “el orden constitucional de la Federación Rusa y la seguridad del Estado”. El gobierno ruso defendió su decisión como una medida para proteger su seguridad y soberanía.
Tras esta designación:
- Se prohibió la operación de Open Society Foundations y otras relacionadas en Rusia.
- Los bancos rusos y las instituciones financieras tenían que bloquear cualquier transferencia de fondos relacionada con estas organizaciones.
- Los ciudadanos rusos y las organizaciones locales tenían prohibido colaborar con las fundaciones o recibir financiamiento de ellas, bajo riesgo de sanciones legales.
Putin mismo ha defendido que Rusia tiene el derecho de protegerse contra interferencias extranjeras. Bajo este argumento, justifica la prohibición de organizaciones como las de Soros, acusándolas de actuar en contra de los intereses nacionales siendo que percibe estas iniciativas como una excusa para influir en la política interna y debilitar la soberanía estatal, especialmente en países que han enfrentado tensiones geopolíticas con Occidente.